Hace justamente una semana pudimos recuperar una cita que habíamos dejado pendiente nada menos que en mayo de 2010. Aún conservo las entradas de patio de butacas que entonces compré para escuchar a Luz Casal en el Gran Teatro de Córdoba.
Y justo en donde dejamos pendiente la cita, a cuenta de ese cáncer traicionero que volvió a la carga, la hemos vuelto a retomar.
Luz llegó a Córdoba con ocho meses de retraso, pero la espera mereció la pena.
Valiente. Generosa. Íntima. Eléctrica. Allí estaba la Luz rockera de 1983, la que escuché en vivo junto a Miguel Ríos justo el día en que me dieron las notas de 2º de Periodismo, y también la Luz de los boleros, la de la media luz.
Una reina sobre el escenario. Un ejemplo. Un lujo.
otra de esas joyas que lucen de maravilla,
mientras cocino un sushi casero,
en un sábado de primavera.
Para saber más: http://luzcasal.es/
Para disfrutar de Luz:
Para disfrutar de Jacqueline:
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